Buena pregunta...
En frío yo diría que no soy coleccionista pero según la RAE sí
Me explico: no pretendo tener todos los modelos, ni todas las variantes, ni todas las panoplias, etc, etc...
Fueron un gran compañero de juegos en mi niñez y los conservé con mimo hasta que (como ya conté en su momento) vinieron mal dadas y tuve que venderlos (todos menos uno...)
Pero siempre me quedó la quemazón de no tenerlos... Y un día lo saqué del cajón... Y le compré ropa. Y sabía de la existencia de la reedición y, tras pensármelo varios días, me lié la manta a la cabeza y compré la Unidad de Rescate...
Y cuando llegó el paquete... la emoción fue tremenda. Y tener la caja en las manos, abrirla... Tantos recuerdos vinieron a mi cabeza... Y mi hijo entusiasmado

Le encantó: tenía pelo de verdad y la ropa bolsillos y botones!!!
Así que desde ese instante volví al redil guiado por tres reglas: volver a tener los que tuve de niño; tener los que quise tener de niño y no pude; conseguir los que (no entrando en las dos categorías anteriores) me gustasen. Todo ello limitado por la capacidad económica, claro.
Bueno y ahora limitado por lo que vaya pidiendo mi hijo: que ya tiene unos cuantos que va acumulando por su cumple y Reyes. Lo que es una gozada, porque juega con ellos que da gusto (y todavía no ha cascado ninguno) pero es una faenilla porque los fondos disponibles hay que dividirlos entre dos
Y yo, pues le veo jugar con sus Geyperman y miro los míos en la estantería porque soy incapaz de tenerlos en las cajas mientras vamos preparando una maqueta (cuartel general).